TAPARSE O DESTAPARSE

Ya hemos hablado de la historia del traje de baño y de cómo ha ido evolucionando según la época y la moda lo han permitido.  Obviamente la sociedad ha sido quien marca la pauta de lo permitido y no permitido.

Hemos pasado desde el bikini que debía ser verificado para que no infringiera la ley, al bikini que deberían ser motivo de cárcel, y sin embargo, seguirán evolucionando.

Parte de las modificaciones que se le han hecho a esta prenda han partido de la necesidad de las mujeres de expresarse y liberarse de la represión que sufrieron durante siglos por considerarse pecaminoso y falto de moral enseñar más allá de la rodilla.

Conforme los tiempos fueron cambiando, los bikinis fueron haciéndose cada vez más pequeños, llegando a diseños que dejos de tapar, destapan y que por lo menos yo preferiría verlas desnudas que con hilos que más bien se ven ridículos.

Sin embargo, quienes aún conservan cierto pudor y optan por utilizar máximo una tanga, han hecho crecer ésta industria, pues los diseñadores se han tenido que dar a la tarea de crear bañadores más novedosos, llamativos, cómodos y de todas las formas habidas y por haber.

Los textiles que utilizan para su creación son cada vez más impresionantes, con tecnología avanzada y diseños increíbles que resaltan los atributos de las mujeres y que en gran medida hacen que se vean super sexies.

Es cada vez más común ver en las zonas de playa, mujeres con trajes de baño espectaculares fuera de la playa, pues su comodidad y moda, han permitido que dejen de verse como simples prendas para meterse al mar y que añadiendo ciertos accesorios, pueden convertirse en prendas para uso cotidiano.

Muchas modificaciones son verdaderas obras de arte creando nuevos estilos y nuevos nombres para los trajes de baño. Pero también muchas otras modificaciones deberían estar prohibidas.  Sin embargo, estemos o no a favor, es una prenda que siempre da de que hablar a cualquier playa o alberca que vayamos.

En nuestra época, las tangas brasileñas sean las más socorridas, pues aunque muestran gran parte de las pompas, aún dejan parte a la imaginación, y si comparamos con lo que se usaba apenas unos 10 años atrás, el cambio es super notorio, cuando apenas en finales de los 90s se seguían usando calzones que cubrían casi todo o ya muy atrevidos a media pompa.

Sea cual sea tu elección, sin duda ni podemos negar que hoy en día existen una gran variedad de estilos y tipos de bikini y trajes de baño que seguramente nos permitirán presumir cuerpazo sin enseñar de más, aunque nunca faltan los modelos que tapan las anginas para aquellas más atrevidas.

Lo que es muy cierto es que no se si la transformación de los trajes de baño se deba al calentamiento global, o el calentamiento global se deba a esa transformación.

HISTORIA DEL TRAJE DE BAÑO

El tan común bañador que usamos todos en la playa con su inmensidad de diferentes tipos, colores y formas, tienen en realidad una historia bastante corta, pues aunque hace siglos ya se usaba una prenda similar, en realidad no estaba diseñado con los fines recreativos con el que hoy utilizamos esta prenda.

El refrescarnos en la playa, en realidad nació como un acto de limpieza.  Siglos atrás las personas no tenían la costumbre de bañarse, utilizaban aceites aromáticos y perfumes para disimular los olores naturales del cuerpo.  Ciertas culturas, irónicamente las menos desarrolladas, habitualmente usaban ríos, lagos o incluso el mar para bañarse y retirar suciedad de su cuerpo.

Éste hábito del “baño” llegó a las altas esferas de la sociedad hasta finales del Siglo XVIII, donde bañarse era ya una cuestión de costumbre y comenzó a convertirse en una cuestión de diversión.  No todos tenían el privilegio de bañarse en una tina, así que comenzaron a visitar lugares públicos como ríos y mares para bañarse aunque al convertirse en un acto social, sobre todo las damas de alcurnia, se bañaban vestidas para evitar enseñar su cuerpo.

A finales de 1800’s, se crea el primer bañador oficial, creado exclusivamente para ésta práctica, pero que obviamente distaba mucho de ser el traje de baño que conoces actualmente.

No es sino hasta 1930 que se crea un traje de baño completo para las mujeres, que aunque incluía un escote,  los muslos se cubrían por completo con una especie de pantaloncillo.  Además de no ser muy atractivos a la vista, eran hechos en su mayoría de lana, que obviamente absorbía enormes cantidades de agua, volviéndolos pesados y muy incómodos.  Los hombres ya podían usas pantalones cortos o shorts pero generalmente tapaban el torso con camisetas.

En la época de los 40’s se crea el bikini, un traje de baño de 2 piezas, que dejaba al descubierto la mayor parte del cuerpo femenino y que causó conmoción en la época.  Esto ayudó también a que los hombres dejaran de lado las camisetas y comenzaran a descubrir su torso de igual manera.

La aparición de las telas sintéticas genera la aparición para los años 60’s y 70’s te bañadores elásticos que reinventaron esta industria.  Comienzan a aparecer bañadores con diseños y estampados coloridos que cada vez dejaban menos a la imaginación.

En los 70’s se liberan las mujeres y nacen los monokinis, que eran bañadores con tirantes que dejaban al descubierto los senos, y de igual manera, se inventa la tanga, que tapaba únicamente los genitales tanto femeninos como masculinos y dejaba al descubierto los glúteos.

De los 70’s a nuestra época no se han modificado tanto, aunque avances en tecnología textil permiten trajes de baño de mayor calidad, durabilidad y muchísimo más cómodos.

Probablemente la única revolución que ha existido en los bañadores desde los 70’s fue la creación del traje de baño creado específicamente para mujeres musulmanas, que deja al descubierto: manos, pies y rostro y que fue denominado burkini.

EVOLUCIÓN DEL BAÑADOR

A todos no encanta lucirnos en la playa con la última moda en trajes de baño, pero muy poco sabemos la evolución que éste tuvo hasta convertirse en lo que es hoy en día.

Aunque existen registros en murales griegos de personas que ya utilizaban este tipo de prendas dedicadas exclusivamente para fines recreativos e inclusive de 2 piezas (lo que hoy consideraríamos bikini), la verdad es que el traje de baño ha sufrido infinidad de modificaciones tanto en su diseño como en los materiales con los que eran fabricados.

Anteriormente, como muchos sabemos, era sumamente mal visto enseñar demasiada piel, lo que era penado para los hombres y ni se diga para las mujeres.  Muchos de nosotros nos hemos topado con fotografías o bien, películas de época en donde los hombres utilizaban un bañador completo de una pieza como si fuera overol con shorts en la parte de abajo y tirantes arriba, lo que prácticamente lo único que dejaba libre eran las piernas de la rodilla hacia abajo y todos los brazos.  En cuanto a las mujeres, era muy similar al de los hombres, aunque existían una especie de “vesitidos”, con una falda que debía llegar a la rodilla (incluso había policías que medían la longitud).

Conforme la sociedad se fue abriendo más, se comenzaron a diseñar bañadores más audaces, hasta que en la época de los 40’s, apareció por primera vez una prenda que revolucionaría la moda de los trajes de baño para siempre, el bikini.    En un inicio ésta prenda causo conmoción; mientras la mitad de la sociedad se quejaba de la inmoralidad de la prenda, a la otra mitad le fascinaba.  Pero fue tal su éxito que hasta hoy día, sigue siendo la prenda número uno en moda playera.

A partir de ese momento se creo toda una industria del diseño alrededor de los bañadores.  En la época de los 70’s comienzan a usarse algo que jamás creíamos posible hasta esas fechas, que las mujeres enseñaran por completo el trasero con sólo un pedazo de tela entre cada nalga.  Se trataba de la tanga.

Si bien a partir de los 70’s ya no se ha modificado en gran medida el estilo, si se ha modificado el diseño, telas y tamaño, pues hoy día podemos encontrar incluso unos bikinis que únicamente tapan los genitales y los pezones, dejando al descubierto todo lo demás.

Los materiales se han modificado enormemente, pasando de telas muy pesadas que para colmo absorbían enormes cantidades de agua y eran casi imposibles de secar, hasta las telas sintéticas de hoy día que son prácticamente impermeables.  Además existen tantos diseños como nombres en el mundo.

Hoy es una industria millonaria que se encuentra en un cambio constante, modificándose al igual que la moda de la ropa en general y marcando tendencias en todas partes del mundo.

MODA PLAYERA PARA HOMBRES: LA GUAYABERA

En la playa siempre buscamos algo práctico y cómodo pues realmente queremos relajarnos.  Pero pocas veces encontramos algo que además de práctico y cómodo sea elegante.  Imposible de pensar y sin embargo, existe.  Se trata de la “guayabera”

Los orígenes de esta prenda no han podido ser definidos, pues algunos dicen que se generaron en Filipinas, mientras otros aseguran que se originaron en Veracruz, México.  Lo cierto es que se popularizó en la isla de Cuba sobre todo por ser utilizadas por personajes políticos.

Esta camisa originalmente hecha de fino algodón, tiene la peculiaridad de ser muy ligera, permitiendo que en días de mucho calor, no suframos terriblemente con el sudor.  Además es increíblemente práctica, pues sin importar la actividad o evento que tengamos, la guayabera siempre será bien vista.

Aunque existe en colores obscuros para ocasiones especiales y eventos nocturnos, generalmente se usa en colores claros, lo que le da su frescura, pues repele los rayos del sol protegiéndonos de sus rayos y manteniéndonos frescos.

Debido a esta característica, las guayaberas son artículos de primera necesidad en la playa ya que puedes combinarlo con cualquier traje de baño:  liso, colorido, estampado y de cualquier tipo; aún así, lucirás increíble y seguro recibirás varias miradas.

Por la mañana puedes usarla con tu traje de baño y por la tarde, para acudir a un restaurant, bar o una cita especial, puedes combinarla con un pantalón de pana y de verdad lucirás muy elegante.  Agrégale un sombrero y lucirás simplemente espectacular.

La elegancia en su diseño realmente la hace una prenda para cualquier ocasión, ya que además existen varios estilos, que van desde las mangas cortas hasta las camisas de gala, que aunque no lo parezca, pueden llegar a costar varios miles de pesos.   Lo que es un hecho es que estas camisas no sustituyen las camisas que normalmente usamos con traje, sobre todo si estamos en una ciudad donde no haya tanto calor, pero créeme que si te decides a usar una, nunca te hará quedar mal.

En últimos años, su popularidad se ha incrementado tanto que incluso se han diseñado algunos modelos para mujeres, que aunque no son “guayaberas” como tal, conservan las mismas características y bases de su diseño.  Seguramente ya habrás visto a más de una mujer en la playa paseando en bikini luciendo una de ellas, o bien, elegantemente vestida con una falda o pantalón de pana y realmente se ven geniales.  Y es que realmente las guayaberas son una prenda que jamás desaparecerá.

Si estás por salir de vacaciones o incluso tienes que ir a alguna ciudad calurosa por cuestiones de trabajo, no dudes en contemplar una guayabera en tu maleta. Sólo procura que sea de color claro para que no falles en la combinación.  Siempre lucirás elegante y le darás un toque diferente; seguro te encantará ser el centro de atención.

SURF TRUNKS O BERMUDAS

Este peculiar traje de baño se ha vuelto una moda entre los hombres y recientemente también en las mujeres. 

Originalmente, se diseño para utilizarse como su nombre en inglés lo indica, para practicar el surf, pues al llegar a la rodilla, protegía las piernas de los surfistas mientras practicaban este deporte.  Además, evitaba que el vello pudiera pegarse a la tabla por la cera que utilizan en la tabla. Su material permitía que no se acumulara el agua en la tela, lo que evitaba que pudieran perder esta prenda al surfear o incluso pudiera estorbarles.

En la actualidad se utiliza para infinidad de actividades o sólo como bañador.  Entre las mujeres ha adquirido importancia también debido a su comodidad, ya que no presenta riesgo de quedarse en cueros al sol!!, además de secarse muy rápidamente.

Aunque ha sufrido algunos cambios, no han sido mayores.  Sólo se ha añadido un cierre frontal de velcro adicional a la jareta común, y una bolsa igual con cierre de velcro.

La diferencia de los surf trunks es que las costuras son sumamente delgadas, la tela muy suave y no se pega al cuerpo y no tiene resorte en la cintura, deteniéndose en la cadera, resultando mucho más cómodo que los trajes de baño comunes.  

Los diseños son sumamente variados, yendo desde los lisos en colores neutros y llamativos hasta los estampados con gran variedad de figuras y colores que en muchos casos son verdaderas obras de arte, y como lo mencionamos antes los hay tanto para hombres como para mujer.

Los estilos se han modificado un poco, y podemos encontrar distintos tamaños, aunque su forma y materiales se mantiene.  Los hay desde los cortos que van a media pierna, hasta los largos que terminan debajo de la rodilla.

El material con el que están hechos realmente es muy práctico.  Además de ser muy suaves al tacto, tanto por fuera como por dentro, resulta que es repelente al agua hasta cierto punto, aunque no impermeable.

Si expones la tela a poca cantidad de líquido, éste realmente no mojará la bermuda a menos que las

cantidades de agua sean excesivas y sin embargo, ésta se secará muy rápido.   Esta cualidad, es la que ha permitido que más deportes comiencen a utilizarlos sobre todo cuando el sudor puede ser un factor importante para determinar al ganador, como por ejemplo en las artes marciales.

Los peleadores de la MMA han optado por éste tipo de prendas, aunque con ciertas modificaciones, debido a que evita que el sudor vuelva resbaladizo al oponente y les estorbe al momento de lanzar alguna patada.

Sea cual sea la actividad deportiva que realices, sin duda es una excelente opción.  En la playa es un traje de baño que te quedará bien sin importar el tipo de cuerpo que tengas y que podrás combinar con otras prendas creando un outfit genial para ir a un restaurant, a la plaza o pasear por los alrededores.