Todos saben que caminar es uno de los ejercicios de mayor beneficio para la salud y el bienestar corporal. Pero si a la
práctica de caminar para fines de
fitness, le añadimos el encanto de
la playa, el rumor de las olas y
un clima sumamente disfrutable.
¿Existirá algo más positivo para el
cuerpo y divertido para unas vacaciones
en la costa? Hay muchos beneficios de dar sencillos paseos por la playa y varios de ellos se relacionan con
tener una buena condición física y
una vida plena. Los invitamos a
seguir leyendo y así conocer varias de las cosas buenas asociadas a dar recorridos fitness por la playa.
En realidad, son varias
las actividades que se pueden realizar en la playa: jugar al voleibol, al futbol, nadar o
simplemente tomar saludables baños de
sol. Pero como les habíamos adelantado, existe una actividad tan sencilla como altamente beneficiosa: dar paseos a pie por la orilla del mar. Y es que, aparte de
resultar sumamente relajadora, es una práctica
muy aconsejable para nuestra armonía
y bienestar, tanto físico como
mental.
Dos caminatas por la playa en sus
extensiones arenosas, es una vía segura para fortalecer los músculos, puesto que desarrollamos un esfuerzo más
grande al pisar un territorio que no es
totalmente plano y realizamos una mayor resistencia. Pero en este caso, una excesiva resistencia tampoco es muy aconsejable ya que, resulta
mejor, caminar por donde la arena se
encuentra bien humedecida, para no
esforzarnos excesivamente. Pero como el gusto se rompe en géneros.
Si se desea un mayor grado de dificultad, entonces se
puede ir avanzando por el agua hasta la altura
de las rodillas. De esta manera se desarrollará
un mayor esfuerzo y los muslos y
glúteos van a recibir un mayor beneficio por esta práctica.
Pero además, conviene
saber que caminar por la arena de la
playa también es sumamente benéfico
para las plantas de los pies. Se
dice que dar paseos por la playa es
una de las mejores vías para calmar la ansiedad, puesto que, casi todas las terminaciones nerviosas que se ubican en los pies, tienen como
cometido, regular las funciones
principales del organismo. Pero es que, caminar, y no solo en la playa, es determinante para la activación del flujo de la sangre y así
beneficiar en gran medida nuestra
circulación.
Como quiera que sea, no
se puede negar que dar agradables
recorridos por la playa, con el sonido del mar como fondo y en tanto se mojan los pies con el oleaje es una de
las vivencias más placenteras que
una persona puede tener.
Así que, no hay porque
esperar más, hasta ponerse ropa de playa, bloqueador y unas zapatillas deportivas y salir a ponerse en forma y al mismo tiempo
disfrutar del encantador entorno de las
playas. Es una opción fitness de
las más destacadas y paulatinamente va ganando terreno en el gusto de los aficionados al atletismo, el deporte, el acondicionamiento físico y el cultivo de un sano estilo de vida.
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