Lucir six-pack no es tan difícil como parece y la natación en la playa puede ser uno de los mejores recursos para
lograrlo. En lo que sigue les ofreceremos algunas valiosas recomendaciones para
trabajar abdominales, cardio y en
general para ponerse en forma practicando una actividad tan económica
como divertida: la natación a ritmo
fitness.
Cuando hace buen tiempo o cuando se está de viaje en la costa y se prefiere la actividad atlética más que el descanso,
entonces conviene nadar todo lo que
se pueda. Por una parte se cumplirá con el requerimiento diario de cardio; por otra, se tonificarán los músculos del tren superior corporal, lo cual no se
logra con otra dinámica fitness.
Aunado a lo
anterior, la natación nos ayuda a fortalecer la musculatura de la espalda, la cual tanto cuesta perfeccionar en el gimnasio. Gracias a
la práctica de la natación, a ritmo fitness, la ropa nos sentará mucho mejor y ponerse
en forma se volverá algo más que entretenido.
Para aprovechar
de mejor manera las sesiones de natación,
ya sea en la piscina o en la playa, es aconsejable usar unas palas
al inicio del entrenamiento. Con
ello provocaremos una mayor resistencia por parte del agua, lo cual nos hará esforzarnos de una manera más
demandante y redituable en términos
atléticos.
La idea es hacer cardio de manera aeróbica y en ello nos ayuda
notablemente la natación. Si se
mantienen las pulsaciones bajas en
tanto se corre o pedalea, la vía aeróbica se mantendrá abierta
permanentemente, con lo cual la energía
se extraerá de las grasas de manera
directa.
Otra de las
ventajas que nos ofrece la natación,
se relaciona con el trabajo que
propicia en las piernas. La mayoría
de los músculos corporales se ubican
en las piernas, lo cual quiere decir
que, si se las trabaja, se quemarán más
calorías a lo largo de todo el día. Además, esto nos ayudará a mantener una
belleza corporal equilibrada: se
acabaron los tiempos del cuerpo grande y
fuerte y las piernas excesivamente
delgadas. Nada mejor para lucir el bikini de moda.
Por último,
siempre que nos sea posible, es aconsejable nadar en secuencias de alta velocidad. Las dinámicas atléticas de alta velocidad, motivan una significativa demanda de oxígeno, tanto como para que
el corazón sostenga un elevado ritmo en sus pulsaciones.
Gracias a ello, se seguirán quemando
calorías, incluso tres horas después de haber culminado el entrenamiento del día.
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